El alma de las bibliotecas y Centros de documentación es el bibliotecario/a. El ha sido y es, el nexo entre el saber aquilatado, conservado y organizado en las nobles arquitecturas y la comunidad. Tiene responsabilidades, objetivos y obligaciones…pero esa alma corpórea es merecedora de los derechos que como Trabajador de la Información le corresponden; Este es nuestro desafió profesional: Construír a partir de nuestra propia identidad una organización genuina para los Bibliotecarios
martes, 19 de marzo de 2013
Asumió el Papa Francisco
sábado, 16 de marzo de 2013
El nombre FRANCISCO del nuevo Papa : un homenaje a San Francisco de Asís
martes, 12 de marzo de 2013
Off Tópic: Los cinco países enemigos de Internet
La organización Reporteros Sin Fronteras denunció este martes a las empresas y naciones que espían a los internautas en el mundo. El régimen sirio es uno de los más implicados. La organización de defensa de la libertad de prensa Reporteros Sin Fronteras (RSF) denunció este martes el caso de cinco empresas cuya tecnología es, o ha sido, utilizada para espiar a internautas en el mundo.
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sábado, 9 de marzo de 2013
Un paseo por las entrañas de la Biblioteca Nacional [Argentina]
La Biblioteca Nacional, ese edificio desnudo de hormigón armado, de corte brutalista, tiene un problema: no sabe cuántos libros alberga en sus depósitos.
jueves, 7 de marzo de 2013
Albert Speer: construir para destruir
Fue el arquitecto de Hitler, y sus libros de memorias, oscuros y trepidantes, son un testimonio de primera mano del horror del nazismo.
Con algo menos de treinta años, Albert Speer se convirtió en el supremo arquitecto del Tercer Reich, y en el hijo que Hitler hubiera querido tener. Speer (nacido en 1905 y muerto en 1981) sorteó los celos y las intrigas de sus rivales en la corte del Führer, criminales de la talla de Goëring, Himmler, Bormann. Llegó a ministro de Armamentos y consiguió que las fábricas funcionaran hasta el fin de la guerra, operadas por trabajadores esclavos. Judíos extraídos de los campos de concentración y de las zonas ocupadas que morían de extenuación en instalaciones soterradas para protegerlas de los bombardeos. Con la derrota fue procesado como criminal de guerra en el juicio de Nuremberg. Salió librado con una pena de cárcel, mientras que sus pares acabaron sus días en el extremo de una soga. A pesar de las prohibiciones, en Spandau se las ingenió para escribir sus memorias en cuanto trozo de papel pudo conseguir. Al salir, veinte años más tarde, las publicó bajo el título Dentro del Tercer Reich . El libro fue, y sigue siendo, un éxito. Lo tradujeron a treinta idiomas y vendió millones de ejemplares. En el ocaso de su vida, Speer se hizo rico. Se convirtió en estrella de los talk-shows, celebridad de la prensa y conferencista internacional. En Londres, la ciudad que aterrorizó con sus misiles, un ACV lo fulminó luego de la última entrevista, entre las miles que concedió. A los 76 años terminó una vida de éxitos con un solo fracaso rotundo: nunca consiguió recomponer la relación con sus seis hijos.
TESTIMONIO PRIVILEGIADO
El libro, en el que se basan muchísimas investigaciones serias, es uno de los más valiosos documentos de ese horroroso periodo de la historia. Se trata a la vez del argumento más demoledor del régimen nacional socialista y el relato apasionado de la vida cotidiana del poder nazi de un testigo privilegiado. No es de extrañar el extraordinario interés que despertó y que continuó con otros dos volúmenes: Infiltrado y Diario de Spandau . No cabe duda de que Speer tenía un don natural para la narración. Sus obras monumentales, esas que hicieron exclamar a su padre, también arquitecto: "Todos ustedes se han vuelto completamente locos", fue una arquitectura narrativa. La concreción en piedra y cemento de la ficción nazi, del delirio de Hitler. Speer resucitó el clasicismo griego, y lo exasperó, lo hizo más grande, más imponente. Construyó los decorados perfectos para que el Führer escenificara sus discursos, propagara la histeria colectiva e inoculara el odio. Le construyó un Olimpo, el hábitat del dios que Adolf creía ser. Para aventar cualquier duda que pudiera surgir sobre su divinidad, en el Campo Zeppelin, Speer montó una "catedral de luz", para que la masa lo adore. Entendió e interpretó a la perfección el cuento de Hitler y le proporcionó el marco imprescindible para que todo un pueblo lo hiciera propio. Los nazis no podrían haber hecho lo que hicieron si no hubieran tenido botas, nadie hubiera temido a un SS en zapatillas o sin los uniformes diseñados por Hugo Boss, el sastre que hoy está de moda entre los ejecutivos de las multinacionales. El nacional socialismo no hubiera sido lo que fue sin esa arquitectura narrativa desde donde el iluminado le impartía la comunión a la raza superior.
CONSTRUIR UNA IMAGEN DE GANADOR
Pero el sueño devino pesadilla, y el Reich de los mil años se hundió en la derrota. La barbarie nazi ya no pudo ser ignorada. Los aliados dispusieron la captura de la jerarquía nazi. El gobierno que sucedió al gabinete de Hitler se había instalado en un castillo cercano a la frontera danesa. Tres hombres callados llegaron al despacho de Speer: George Ball y Paul Nitze, directores del Estudio de Bombardeo Estratégico; y un economista, John Kenneth Galbraith, quien formó parte del equipo que debía evitar que la inflación en EE.UU. Afectará los esfuerzos de la guerra. Su misión: sacarle al ministro la mayor información posible antes del juicio. Dispusieron de él durante diez días en los que Speer colaboró ampliamente. No sólo les brindó todos los datos que le pidieron, también les indicó los lugares donde se guardaban documentos ultra secretos y les facilitó las llaves de las bóvedas. Ninguno de ellos reveló jamás qué se pidió ni qué se dio a cambio de tan valiosa data. Una vez exprimido, Speer fue entregado al Tribunal. Ahora sus lectores no eran nazis alucinados, sino militares rusos, americanos, ingleses y franceses. Los últimos tenían muchas cosas en común, pero los rusos eran huesos duros de roer. Tenía que conseguir que los tres últimos le perdonaran la vida y que se impusieran a los implacables soviéticos. En su estrategia defensiva había dos puntos muy difíciles de soslayar: los trabajadores esclavos y los campos de concentración. Speer no podía ignorar su existencia y el miserable rol que le hicieron jugar en la producción de armas y municiones. Speer no fue mejor que sus colegas nazis y como arquitecto no dejó nada de valor. Pero al narrador, se le ocurrió una fórmula genial: "Yo no lo supe; debí haberlo sabido, pude haberlo sabido, pero no lo supe". Una maniobra narrativa notable: no pudo haber participado de algo que ni siquiera sabía que existía. Sobre esta defensa construyó una figura simpática, seria, desenvuelta y arrepentida que, con lágrimas en los ojos, se declaró responsable una y otra vez, pero nunca culpable. Un nazi bueno. Sólo dos de los acusados se diferenciaron claramente del resto. Uno fue Goëring quien, despreciando la cobarde estrategia de sus colegas, de endilgarle la culpa a otros, dijo al tribunal: "Toda mi defensa puede resumirse en tres palabras: chúpenme el culo". En el otro extremo, Speer se distanció de uno y otros asumiendo su responsabilidad y mostrándose amable, colaborador, desenvuelto.
Excusó su "ceguera voluntaria" en una tipología muy fácil de digerir para los vencedores, el tipo de hombre que se estaba volviendo muy importante en todos los estados que participaron en la guerra: el técnico puro, el hombre brillante que no proviene de una clase social destacada, ni tiene antepasados gloriosos y cuyo único objetivo es abrirse camino en el mundo gracias a sus aptitudes de organizador. Su falta de espesor psicológico y la pericia con que maneja la organización de los medios de producción hacen de este tipo el sujeto descollante de aquella época y también de la actual. Aquel fue su tiempo, el momento en que a un joven buen mozo, elegante y desenvuelto, se le ofrece un éxito que no duda en tomar más allá de cualquier otra consideración. Con sus notables dotes de narrador se identificó con ese arquetipo consagrado que sigue vigente hasta el día de hoy. El ganador.
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lunes, 4 de marzo de 2013
La BIBLIOTECA personal del LIBERTADOR
"El estudio de las bibliotecas que armó San Martín a lo largo de su vida nos revela los caminos que anduvo en esos libros y por esos libros", dice Barcia en la introducción de la obra. Y explica: "hemos ordenado, por vez primera, ese caudaloso conjunto de libros por ámbitos de disciplinas y campos del saber, y hemos estudiado cuanto dijo y escribió San Martín sobre libros y lecturas".
Barcia es doctor en Letras por la Universidad Nacional de la Plata; investigador principal del CONICET; presidente de la Academia Argentina de Letras y de la Academia Nacional de Educación; miembro correspondiente americano de la Real Academia Española, de la Academia Nacional de Letras del Uruguay; doctor Honoris Causa por las universidades Ricardo Palma, Lima, Perú; Nacional de Tucumán, de Salta; de Concepción del Uruguay y profesor emérito de la Universidad Austral.
María Adela Di Bucchianico es licenciada en Bibliotecología y Documentación y especialista en Tecnología de la Información. Escribió, junto a Barcia, el libro La Biblioteca Popular de Buenos Aires (1878-1883): Estudio e índices (2012).
Según Barcia, "San Martín constituye un caso impar de un militar que arrastra consigo una larga decena de cajones y petacas con libros, a través de todos sus caminos y rutas: cruza el Atlántico de España a Buenos Aires; atraviesa con ellos la latitud ilímite de La Pampa; los traspone por la Cordillera, navega con ellos por el Pacífico hacia las costas peruanas".
"Es un gesto impar -continúa el catedrático-, como si en esos libros residiera la reserva de energía para su acción: eran su mejor parque de armas, al ser la ilustración para todos sus caminos".
Más adelante, Barcia afirma que "San Martín fue lector gustoso. Ahí están para testimoniarlo los inventarios de sus bibliotecas o «librerías» —como se decía en el siglo XIX, para referirse a las colecciones de libros para uso personal— y la preocupación por no abandonarlas en sus desplazamientos, arrastrándolas en sus petacas de un lado al otro del Atlántico y por el continente americano".
"Por supuesto —explica— que no podemos inducir la latitud y profundidad de sus lecturas por la relación de las obras contenidas en su librería. Pero consta, sobradamente, que era un lector habitual. El mismo nos ha dejado testimonio de su vocación de tal: «existen en Mendoza, entre otras preciosidades de este jaez, las destinadas a la lectura de las largas noches de invierno que me esperan en mi vejez»".
Junto a las ilustraciones del Libertador en diferentes momentos de su intensa vida que se aprecian en el libro, se destacan citas que dan cuenta de su pasión por los libros.
Una de esas citas abre el volumen: "La ilustración y fomento de las letras, es la llave maestra que abre las puertas de la abundancia y hace felices a los pueblos; ese que ha sido la cuna de las ciencias ha sufrido el ominoso destino que le decretaron los tiranos para tener en cadenas los brillantes ingenios de ese país; yo deseo que todos se ilustren en los sagrados libros que forman la esencia de los hombres libres".
Off Tópic: Poder Judicial:...Cuando se habla de “democratizar” es sinónimo de “disciplinar”.
APENAS SE CONOCIERON LAS INTENCIONES DEL P.E.N. DE HACER ALGUNAS REFORMAS EN EL ÁMBITO JUDICIAL, SE CONOCIÓ UN REPORTAJE EFECTUADO A JORGE YOMA, DIPUTADO NACIONAL: PRESIDENTE DE LA COMISIÓN DE JUSTICIA DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS, CUYO TEXTO ADJUNTO:
Ni bien Cristina planteó reformar el Poder Judicial, muchos se acordaron de Jorge Yoma. Es que el diputado riojano, que integra el bloque K pese a que desde hace meses es muy crítico con el Gobierno, es presidente de la comisión de Justicia, por donde deberán pasar los proyectos.
-¿Qué opinión tiene de los anuncios que hizo Cristina?
-En todos los proyectos del Gobierno, hay que pensar en una segunda intención encubierta. En este caso, si se ve el tenor del discurso y el contexto en el que los anuncia, se nota que es para domesticar al Poder Judicial. Y CUANDO HABLA DE "DEMOCRATIZAR" ES SINÓNIMO DE "DISCIPLINAR".
-¿Está de acuerdo con que los integrantes del Consejo de la Magistratura sean elegidos a través del voto popular?
-Hay que esperar a ver la letra del proyecto, ya que muchas veces difiere de lo que se anuncia. Pero tengo muchísimas dudas si será constitucional y cómo se va a instrumentar. Lo que sí sostengo es que no puede haber tratamiento exprés para ningún proyecto.
-Al estar enfrentado al oficialismo, ¿cómo imagina qué será su trabajo al frente de la comisión?
-No va a haber problemas, al igual que en otras ocasiones. Mis compañeros de bloque respetan mis críticas al Gobierno.
miércoles, 13 de febrero de 2013
CUBA, Una ISLA de SOPLONES / por Iván García Quintero
Es mulato y tiene los brazos tatuados con epigramas chinos. Vive en un solar del barrio mayoritariamente negro de Cayo Hueso, en el centro de
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martes, 5 de febrero de 2013
El original manuscrito
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