martes, 30 de abril de 2013

El Alfabeto inspirado en el KAMA SUTRA


La artista francesa Malika Favre creó una tipografía inspirada en las posiciones del famoso libro. Su obra hizo furor en el Somerset House, en pleno centro de Londres.
Este alfabeto seguro que va a dar que hablar. Y así lo creó con gran sentido artístico, la artista francesa Malika Favre. Ella diseñó este alfabeto inspirado en las posiciones del Kama sutra, y logró que su reciente exposición en el Somerset London, un prestigioso centro cultural y de arte, en pleno corazón de Londres, sea furor total.
Favre es una reconocida ilustradora de origen francés, que actualmente vive en Londres y que ama el arte erótico.
"Me convocaron para ilustrar la portada de una nueva edición del Kama sutra. Y a partir de allí me interesó desarrollar una tipografía con sentido de arte erótico inspirada en esas posiciones tan amorosas. Estudié las propuestas tipográficas de los artistas de thekamasutra.co y desde allí realicé mi versión", declaró recientemente Favre en Londres.
Malika además de ser una reconocida ilustradora y a cargo de uno de los estudios de diseño gráfico más importantes hoy de Londres, colaboró con las principales revistas del mundo, entre ellas la innovadora Wallpaper y el dominical inglés The Sunday Times.
En el 2011 el editor Paul Buckley de Penguin Books US convocó a Favre para ilustrar una nueva edición de lujo del Kama sutra original de Vatsyayana, el escritor y religioso de la India autor de la versión del Kama sutra original.
A partir de este trabajo que tanto la interesó,  Favre decidió desatollar el set de las 26 letras del alfabeto con los dibujos inspirados en el Kama sutra.

domingo, 28 de abril de 2013

Suazilandia no queda tan lejos….



 

El rápido camino hacia Suazilandia / Por Marcelo A. Moreno

Suazilandia es quizá uno los países africanos más pobres. Casi el 70% de sus 1,2 millones de habitantes vive con menos de un dólar por día. De tantas desgracias, dos se destacan: es la nación del continente con mayor número de infectados de sida -cerca del 40%-, por lo cual la expectativa de vida no llega a los 50 años, y también el que padece la última monarquía absoluta.

Mswati III es el dueño de este reino que en nada se parece al de los cielos. Pero cuando cumplió hace pocos días 45 años, alcanzó el cielo con las manos al recibir treinta y dos BMW de regalo. El monarca está acostumbrado a los obsequios importantes: al cumplir 44, un amigo que prefirió el anonimato, le regaló un jet DC-9 que cuesta apenas unos 50 millones de dólares.

Este gobernante a quien le gusta portar lanza y usar taparrabos de piel de leopardo es hijo de Sobhuza II, que proclamó la independencia del país en 1968 y celebró elecciones algo restringidas en 1972. 

Como la oposición ganó tres puestos en unas Cámaras Legislativas cuya agobiante mayoría era de su partido, en 1972 abolió la Constitución, disolvió el Parlamento y prohibió los partidos políticos. Durante la transición entre padre e hijo en el trono algunas instituciones levantaron cabeza, por lo cual después de unas elecciones que no le cayeron del todo bien, el sucesor Mswati II ilegalizó las formaciones políticas en 2003, pudiendo ser electos sólo los súbditos a título personal.
Ahora las cosas andan en Suazilandia casi al paladar real. El monarca nombra a los parlamentarios - cuya función no es la de legislar-, lo mismo que a los jueces del Tribunal Supremo y del Tribunal de Apelaciones. Las agrupaciones políticas han sido nuevamente legalizadas pero, ¡ay!, ninguna pudo participar en las elecciones del 2003 debido a un decreto real de último momento. Sin embargo, no todas son buenas noticias para la realeza: pertinaces, florecen cada vez más partidos clandestinos en el reino.

Para gratificarse frente a estos sinsabores, Mswati II se casa una vez al año (tiene ya 14 esposas) luego de una solemne ceremonia en la cual miles y miles de vírgenes menores de 18 años desfilan pecho al aire ante él y su madre (entre ellos de Edipo no hablan). Luego de sopesarlas con el debido tacto, el rey y su mamá eligen a la afortunada nueva integrante del harén.
El grotesco de Suazilandia puede producir a un mismo tiempo horror y sonrisas. Los habitantes del país están entrenados en la desesperación y su déspota resulta mucho más monstruoso que ridículo.

Es muy difícil llegar a ser una nación como Alemania -según deseó, hace mucho tiempo, en un reportaje, la doctora de Kirchner-, como Noruega, como Dinamarca, como Nueva Zelanda o como Suiza, entre otras, en que las instituciones funcionan como relojes. Es más fácil, mucho más fácil, parecerse a la Rusia de Putin, a la Cuba de la dinastía Castro, a la Siria de la familia Al Asad o la Corea del Norte de los Kim, donde todo lo dicta una voluntad única.

Para integrar el primer grupo de naciones se requiere un arduo, insistente y delicado trabajo republicano, buscar equilibrios que terminen con las formas del atropello, venerar la ley con religiosidad, frenar arbitrariedades y personalismos, proteger a las minorías. En resumidas cuentas, que los ciudadanos gocen de sólidos derechos contra la tentación a la prepotencia que tienden a ejercer los Estados.

Para entrar en el segundo grupo, el camino, como todos los que descienden, es fácil. Y vertiginosamente rápido.

Para empezar, es necesario eliminar los organismos de autorregulación y autocontrol del Estado, haciendo que todas sus dependencias cumplan escrupulosamente las órdenes del poder central. Luego, perseguir y acorralar a la prensa indócil. Después, utilizar los medios de supervisión del Estado sobre las empresas y sindicatos autónomos para presionarlos y así someterlos a los deseos gubernamentales. Luego, reformar el Poder Judicial de tal manera que aprenda a obedecer puntualmente los anhelos de ese poder. Finalmente, reformar la Constitución y diseñarla al propio gusto para lograr que el hábito del poder devenga en caprichosa costumbre hereditaria.

Los recursos económicos para instalar este modelo no constituyen un secreto: se trata de saquear a manos llenas, sin falsos pudores, las arcas del país.
Así, lo que no logre la fuerza, lo podrán obtener los recursos de los desfalcos, el clientelismo o la demagogia. En resumidas cuentas, en esos países, los habitantes -ya no ciudadanos- carecen de derechos y quedan a la intemperie frente al poder.

De las desdichas ajenas no conviene ni resulta decente reírse. Entre otras cosas, porque Suazilandia no queda tan lejos.

jueves, 25 de abril de 2013

39.ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires

Desde el  25 de abril al 13 de mayo de 2013. La Rural, Predio Ferial de la ciudad Autônoma de Buenos Aires.
 

Lema: "Libros como puentes"

Los puentes unen riberas, ciudades, países. Pueden ser un simple tablón echado sobre unas rocas o una construcción que pone en juego la ingeniería más sofisticada. Duran siglos o se deshacen con la primera lluvia, pero siempre sirven para transportar a las personas de un lado al otro. A lo largo de la historia, los libros han demostrado que también son puentes fabulosos: entre abuelos y nietos, entre personas con distintas formaciones, entre ciudadanos de países distantes, entre lectores de la Edad Media y lectores del presente.

Este año, la Feria del Libro afianza los puentes que siempre tendió hacia las culturas de otros países, recibiendo como primer Invitado de Honor a una ciudad marcada por estas construcciones: Amsterdam. Por todos estos motivos, la Fundación El Libro elige como guía una imagen simbólica fuerte, que invita al público a salvar cualquier obstáculo y entrar, de lleno, al mundo de libros.
 

Aquí tenés  toda la programación para la Feria del Libro Internacional de Buenos Aires
http://www.el-libro.org.ar/internacional/programa

 
Agregamos  algunos links con información clave de la Feria:











miércoles, 24 de abril de 2013

Fernando Báez: símbolo y resistencia de un bibliotecario comprometido con su tiempo. [Reportaje]



Siendo niño, una inundación se llevó su biblioteca, hecho que marcó para siempre su vida y su obra. Incursionó en numerosos espacios de las ciencias sociales, investigó sobre la destrucción de libros. Acaso sin saberlo, ha construido una épica desde el sentido ético de la disciplina. El hombre que un buen día decidió esclarecer con sus investigaciones los patrimonios destruidos de la humanidad, el mismo que ha logrado enfrentar adversidades y obstáculos con coherencia y sacrificio personal.
A la manera de un Rimbaud, el escritor venezolano ha conocido prácticamente todo Oriente Medio, ahora nos dice que está investigando sobre la ruta trashasariana de los libros, visitando pueblos y recogiendo testimonios. Cuesta imaginar el alcance de su obra.
Actualmente su causa es motivo de ejemplo para los bibliotecarios involucrados con el rol social. No deja de aprender y de enseñar, confiesa ser un nómade incurable, difícilmente alguien pueda llegar tan lejos en la profesión. Un concurso de ensayos bibliotecológicos sobre la censura y la destrucción de libros lleva su nombre, aún se recuerda su discurso, celebrado en la Biblioteca Nacional de Argentina en diciembre de 2006.
Feliz paradigma del bibliotecario comprometido con su tiempo.

Palabras clave:
MEMORICIDIO; PATRIMONIO CULTURAL; BIBLIOCLASTIA; ROL SOCIAL BIBLIOTECARIO

Noticia biográfica:
Fernando Báez, venezolano, asesor de la UNESCO para Medio Oriente, está considerado como una autoridad en el campo del patrimonio cultural y tráfico ilícito de bienes culturales. En 2003 visitó Irak como miembro de las dis­tintas comisiones de la UNESCO que investigaban la destrucción de las bibliotecas y museos en esa nación. Doctor en Ciencias de la Información y Bibliotecas, es autor de 17 libros. Actualmente vive en Egipto, acaba de recibir una beca del gobierno de Qatar para investigar la ruta transahariana de los libros en la historia de Europa, África y Medio Oriente. Algunos libros suyos más conocidos: La destrucción cultural de Irak (2005), El saqueo cultural de América Latina (2008), Nueva Historia universal de la des­trucción de libros (Destino, España, 2011). Es Premio Internacional de Ensayo Vintila Horia de Ensayo y Premio Nacional del Ministerio de Cultura de Venezuela, Premio Mejor Libro Extranjero en Brasil. Fue Director de la Biblioteca Nacional de Venezuela en 2008.

Entrevista:

¿Por qué la Bibliotecología?

Me apasionan los libros, su historia, su contenido, su conservación, su significado como patrimonio cultural. Ahora que casi no se habla de bibliotecología, sino de ciencias de la información, el término mantiene su arraigo como disciplina científica para el estudio de las bibliotecas, que contrario a los pronósticos no mueren sino que se transforman. La bibliotecología está hoy en día más viva que nunca precisamente porque en la sociedad de la información es un reto participar en los cambios que provoca la globalización asimétrica que vivimos.

¿Recordás en qué momento o circunstancia pasó por tu mente ser bibliotecario?

Lo supe desde que era joven porque de chico me crié en la biblioteca pública pequeña de mi pueblo, San Félix de Guayana, junto al río Orinoco que elogió Julio Verne en su obra El soberbio Orinoco. Allí me dejaba mi madre para poder ir a trabajar arreglando ropa o vendiendo empanadas y mi padre, como era un abogado honesto, intentaba conseguir trabajo con muy poca suerte. Criarse en una biblioteca popular te hace sentir orgullo cuando ves un anaquel, cuando hablas con un bibliotecario.


¿Qué opinas del rol social del bibliotecario?

Sin un rol social, un bibliotecario es un zombi de una estructura tecnológica formulada para deshumanizar a quien acude a las bibliotecas, que no son museos del libro sino también centros de formación, centros de alfabetización, centros de formación de ciudadanía, centros de debate, centros culturales para el fortalecimiento de un buen plan de lectura popular, centros para apoyar la diversidad cultural.


¿Que lecturas recomendarías para estudiantes de bibliotecología?

A los jóvenes que se inician en este extraordinario destino que es ser bibliotecario les recomiendo Farenheit 451 de Ray Bradbury, La biblioteca de noche de Alberto Manguel, Una soledad demasiado ruidosa de Bohumil Hrabal, La biblioteca de Babel de Borges, 1984 de George Orwell, La biblioteca desaparecida de Luciano Canfora, Un golpe a los libros de Judith Gociol y Hernán Invernizzi, Nadie acabará con los libros de Umberto Eco y Jean-Claude Carrière, Las venas abiertas de América Latina de Eduardo Galeano, y creo que les haría mucho falta estar claros en lo que les viene encima y deberían leer esa maravilla que es Ideas de Peter Watson.


¿Qué estás leyendo actualmente? Y ¿cuál lectura te impactó? (no importa la disciplina, puede incluir literatura)

Leo mucho, leo intensamente, he descubierto que no puedo no leer. Tuve la suerte de descubrir por mi cuenta la literatura árabe, incluso la de la época de Al Ándalus, y eso me ha enriquecido en los tiempos más cercanos como lo hizo en su momento la literatura griega. Leo sin horarios preestablecidos, por gusto, por capricho, porque sí, porque soy feliz al leer, porque en mi enfermedad actual es un alivio. Ahora acabo de culminar la lectura deCivilización de Niall Ferguson, y casi siempre releo mucho. A mi edad, la relectura es una rutina, volver a Aristóteles, a Platón, a Plutarco, a Montaigne, a Alfonso Reyes, a George Orwell, a Stevenson, al Popol Vuh, a los grandes poemas prehispánicos de nuestra grandes culturas ancestrales, a Epicteto, a Hermann Hesse, a Cees Nooteboom, a Elías Canetti, a Paul Bowles, a Paul Auster, a Flann O´Brien y a mi gran favorito Rafael de Nogales Méndez, un escritor olvidado en Venezuela que adoro por encima de todos los autores de mi país.


Un concurso de ensayos bibliotecológicos mereció tu nombre ¿qué representa para vos el concepto biblioclastía?

Ciertamente, ese concurso fue un homenaje que me llegó al alma, organizado por Tomás Solari, un hombre que se ha comprometido con las grandes causas de la defensa de los bibliotecarios y el generoso y valiente Hugo García. Ningún homenaje de gobierno alguno me ha conmovido como lo que sucedió en Argentina cuando pusieron mi nombre a un concurso sobre la censura y la destrucción de libros. Eso me marcó, me dio claridad sobre lo bueno y lo malo que vendría. Tú eres parte de esa generación maravillosa que participó y dejó su nombre en el volumen final que quedó del concurso y Biblioclastía fue y sigue siendo un volumen mítico organizado por Tomás Solari y Jorge Gómez publicado por Eudeba. Siempre se usó iconoclastia para referirse a fenómenos de destrucción cultural, pero biblioclastía es indispensable para comprender barbaries como la de los nazis en 1933 o la de los militares en el sur en la década de los ochenta.


Se habla frecuentemente de la lenta desaparición del libro, incluso en foros de bibliotecología ¿Qué te provoca esta situación?

Primero debemos preguntarnos qué es un libro. Un libro es ante todo una tecnología de la memoria cuyo contenido cultural puede ser leído, oído o palpado debido a su presentación impresa o electrónica en forma compaginada. El libro es un instrumento perfeccionado por la evolución cognitiva adaptativa como resolución de una profunda necesidad social explícita de plasmar una guía más duradera en la supervivencia en la transmisión de corriente de ideas, datos o narrativas.  El libro reafirma el lazo de identidad que proporciona el lenguaje. Elizabeth Eisenstein ha mencionado tres de los efectos más notables de la imprenta: el empuje de la revolución científica, la Reforma Protestante y el redescubrimiento de los clásicos en la Italia del Renacimiento. Pero hay más: el poder del libro se ha manifestado en la creación de obras que se hicieron sagradas desde sus tiempos manuscritos: entre la Torá y el Talmud (Judaísmo), la Biblia (Cristianismo), El Corán (Islamismo), los Vedas (Hinduísmo) sustentan nada menos que las creencias devotas de 4 mil millones de personas. Esto sin contar la influencia prodigiosa de las Analectas de Confucio o el Tao Te Ching de Lao-Tsé en los países asiáticos. Desde una perspectiva social, no hay duda que cuatro libros han tenido un impacto directo sobre grandes giros en la mentalidad de los pueblos a lo largo de décadas y décadas: la Ilíada de Homero, la Cabaña del tío Tom de Harriet Beecher Stowe, El origen de las especies de Charles Darwin y el Manifiesto Comunista de Karl Marx y Friedrich Engels. Han sido tres revoluciones las que han modificado a la humanidad y cada una tiene que ver con el libro: el paso de lo oral a lo escrito, el paso de lo escrito a lo impreso y el paso de lo impreso a lo digital. En 2012, hay 192 países que son estados miembros de la ONU y otros 10 países no reconocidos, y en todos hay presencia de libros, algo que nunca antes había sucedido en el mundo. Decir que el libro está en sus finales es temerario porque ha llegado la era digital. Nadie cree que pueda cesar el lenguaje, pese al hecho indiscutible de que el hombre procede de especies que nunca supieron lo que era una palabra; nadie se atrevería sin soberbia a anunciar el fin de la escritura, que tiene sólo 5.500 años y el Homo Sapiens tiene 150.000 años. Pero hay un ensañamiento contra el libro desde sus comienzos y eso sigue. Es sorprendente.

Tus reflexiones sobre memoricidio y etnocidio permitieron vincular acciones de Estado con la depredación sistemática de la identidad ¿qué hay detrás del deseo por borrar la memoria y la identidad?.

Creo que el libro no es destruido como objeto físico sino como vínculo de memoria, esto es, como uno de los ejes de la identidad de un hombre o de una comunidad. No hay identidad sin memoria. Si no se recuerda lo que se es, no se sabe lo que se es.
A lo largo de los siglos, hemos visto que cuando un grupo o nación intenta someter a otro grupo o nación, lo primero que intenta es borrar las huellas de su memoria para reconfigurar su identidad. En el fenómeno del Auto de fé contra los libros es manifiesto que quienes lo realizan reconocen que no basta con el asesinato o encarcelamiento de un escritor o con el genocidio del pueblo que se ve retratado en el espíritu de ese texto. Es imprescindible ir a la raíz del problema y entender con suficiente precisión que el memoricidio es la base de la destrucción de obras y sus principales ideólogos están animados por un radicalismo que pretende instaurar verdaderas guerras de naturaleza política o religiosa. Así sucedió cuando quemaron los códices mexicas o mayas o los quipus incas, que fueron los primeros libros tridimensionales de la historia.

Fernando ¿qué fue lo que originó tu interés por investigar sobre la destrucción de los patrimonios?

Como he dicho, me crié en una biblioteca, pero la felicidad en que vivía se interrumpió abruptamente, porque el río Caroní, uno de los afluentes del río Orinoco, creció sin previo aviso e inundó el pueblo, no sin llevarse en sus corrientes los papeles que constituían el motivo de mi curiosidad. Acabó con todos los volúmenes. De esa forma, me quedé sin biblioteca, sin refugio y perdí parte de mi infancia, completamente arrasada por las oscuras aguas. A veces, en las noches siguientes, veía en sueños cómo se hundía La isla del tesoro de Stevenson y flotaba un ejemplar de Rubén Darío, Rómulo Gallegos o Ricardo Güiraldes. Ese terrible recuerdo ha dejado trazos indelebles en mi vida, mi obra.

A tu entender ¿Cual es el rol que debe cumplir una Biblioteca Nacional?

Es una pregunta difícil, mucha gente quiere saber por qué siendo el primer bibliotecólogo en ser Director de la Biblioteca Nacional de Venezuela apenas duré ocho meses. Voy a explicar qué sucedió porque me permitirá responder tu pregunta.
Mi experiencia personal en la Biblioteca Nacional de Venezuela fue una muestra de los duelos que tiene cualquier bibliotecario que quiera introducir cambios verdaderos. Llegue con todas las mejores expectativas, pero no me imaginaba que iba a encontrar un Instituto Autónomo escindido y resultó depender en la práctica del Ministerio de Cultura (sic), una Biblioteca con un reglamento anacrónico, un presupuesto enorme destinado en su 90% al pago de salarios, sin partidas suficientes de investigación y mantenimiento, con colecciones en peligro y con una visión pesimista del futuro entre los trabajadores y trabajadoras. Todo el mundo tenía grandes expectativas, algo complejo en un país hiperpolarizado políticamente entre los seguidores de Chávez y sus detractores, y la verdad es que no funcionó porque mi desconocimiento de la realidad venezolana era enorme debido a que había pasado mucho tiempo lejos.
Según el profesor Colin Higgins de Cambridge, en su ensayo "Library of Congress Classification: Teddy Roosevelt's World in Numbers?" (editado en la revista Cataloging & Classification Quarterly, Volumen 50, Nro. 4, 2012), yo he sido la primera persona en declarar una guerra cultural a la Biblioteca del Congreso de EEUU acusándola de imperialismo cultural, y eso los obligó a revisar sus catálogos y desacreditó su plan expansivo de participar en talleres de formación en América Latina, coordinados como instrumentos para transculturizar a nuestros pueblos por medio del sistema de información público. Yo rompí relaciones nada menos que con la IBM, que cobraba millones por manejar la base de datos desactualizada del catálogo principal de la propia Biblioteca en las instalaciones de una zona llamada Parque Central sin medidas de seguridad apropiadas; rompí relaciones con IFLA, que se ha convertido en una trinchera que sigue las pautas de EEUU en materia de información; rompí relaciones con trasnacionales que pretendían que se hiciera una licitación para un nuevo programa de catalogación con software privado.   
Para darte una idea de esa utopía que quise postular como plan de gestión, propuse una Biblioteca Nacional abierta las 24 horas, con una estructura multidimensional en lo tecnológico y cultural, propuse usar software libre en toda la Biblioteca, propuse integrar a los Colectivos Populares de los Barrios más pobres y a los Consejos Comunales. Propuse un Centro de Estudios de los Pueblos Indígenas y otro Centro de Estudios del Medio Oriente con Irán incluída, lo que causó un escándalo. Propuse y preparé los planos para construir la Gran Biblioteca Popular de Caracas en el Parque del Oeste, cerca de las instalaciones de un sitio que fue derrumbado y había sido una cárcel infame llamado Retén de Catia: quería que fuera un símbolo. Gané enemigos por todas partes, en todos los bandos, porque me resistí a ceder ante las fuerzas de un sistema de complicidades: duré ocho meses intensos que a muchos parecieron similares a un huracán. Irónicamente, la primera vez que se editó una Historia de la Biblioteca Nacional fue en mi gestión y ya tenía listos los diez primeros títulos de una colección de bibliotecología social. Se culminó el Primer Atlas de las Bibliotecas Públicas en Venezuela, que quedó inédito; se lanzó el Proyecto de Biblioteca Digital que buscaba integrarse a iniciativas de América Latina sin ayuda del monopolio de Google. Se implantó un Plan de Seguridad y se trajo a la Brigada Patrimonial del Ejército para proteger las instalaciones; se firmó un convenio con la UNESCO que quedó interrumpido para cursos y fortalecer el Centro de Conservación. Se firmó un convenio con Instituto de la Defensa Nacional para preparar un plan de protección del patrimonio bibliográfico. Durante la celebración de los 175 años de la Biblioteca logré que su imagen estuviera hasta en las tarjetas de teléfonos y la presencia mediática fue mundial porque diseñé una estrategia de choque frontal en todos los escenarios. Tuve la fortuna de tener un equipo de gestión de primera, sin esfuerzo colectivo hubiera sido imposible.
La Biblioteca Nacional de Venezuela, dicho sea de paso, era la hija mimada de EEUU, según la investigación que logré hacer:  fue hecha a imagen y semejanza de asesores de la biblioteca del Congreso desde 1953. Debo confesar que combatí el elitismo  intelectual, sin importar las consecuencias, no me interesaba jubilarme sino dar todo de mí en un momento clave del país y del mundo. Me las jugué todas contra el imperialismo cultural, y obviamente esta utopía provocó que me pidieran la renuncia, toqué intereses delicados y esto no iba a quedar impune. Me insultaron, me calumniaron con las barbaridades más injuriosas e inútiles, pagaron y estimularon una campaña de cagatintas irrelevantes para difamarme en portales de Internet, el propio Ministro de ese entonces (hoy destituido) usó todos los recursos que tuvo a su alcance para obligarme a renunciar, nunca me rendí porque nunca me rindo y el Ministro se vio obligado a solicitar un decreto desde la Vicepresidencia, de modo que se nombró un nuevo director (hoy también destituido ya) sin ejecutar legalmente mi salida. Alguien dijo que me querían preso y me alegré porque desde la cárcel podría producir un terremoto mediático internacional para alertar sobre lo que ocurría, tomando en cuenta que yo denuncié la destrucción cultural de Irak, se acobardaron y luego el tiempo me dio la razón para resistir toda infamia. Te confieso que no fueron ocho meses de tranquilidad sino de combate contra décadas de inercia, y todavía mi nombre es sinónimo de horror para los burócratas de izquierda o derecha, pero también es sinónimo de esperanza para los bibliotecarios jóvenes que quieren transformaciones que dejen atrás siglos de servidumbre cultural a EUUU en el manejo de la información. Y un día esto sucederá, quise dejar un antecedente.


Fuiste Director de la Biblioteca Nacional, escribiste libros, vivís dentro de la cultura de Oriente, estuviste en situaciones conflictivas, en Buenos Aires aún se recuerda tu encendido discurso sobre la destrucción de libros, defendiste un modo de entender el mundo ¿Como te ves dentro de unos años? ¿qué sigue? ¿te imaginás ligado a la docencia, a seguir publicando, tomar otros rumbos?

Me gusta el azar, soy un nómada incurable, Daniel. Hoy quiero conocer los sistemas de bibliotecas móviles de Medio Oriente y África y he visitado las bibliotecas de Camellos de Mauritania, Marruecos, Egipto y Malí, he recorrido parte de África ayudando a llevar libros a los niños, acabo de concluir dos libros de 600 páginas (en noviembre de 2012 sale el primero y es una sorpresa), estoy justo investigando la ruta transahariana de los libros, no hay un país del Medio Oriente que no haya recorrido, voy lo más lejos que puedo porque quiero dedicar mi vida a despertar la pasión por los libros, y me veo a mí mismo en marcha, en un rol social de apoyar a los más humildes y necesitados porque tenemos que vencer las barreras de un mundo que fomenta la competencia y no la solidaridad, un mundo que premia el egoísmo en lugar de reconocer que la cooperación es lo que hace humanos. Defiendo día tras día el patrimonio cultural porque es nuestra herencia, la que nos recuerda que nuestra supervivencia se debe a la revolución que pasó de la dependencia estrictamente biológica a la cultura.


Hace poco escribiste algo muy sentido sobre Hugo García, compartieron un encuentro memorable en la Biblioteca Nacional, recientemente se creó una Cátedra Abierta en su homenaje ¿qué recordás de aquel día?

Me entristece hablar de Hugo García porque ya está muerto y toda esa energía, toda esa ética, toda esa curiosidad, se ha perdido. Hugo era el mejor ejemplo de un bibliotecario con compromiso social. Pero por otra parte me siento orgulloso de haberlo conocido y compartido porque hoy puedo decirle a las nuevas generaciones que son hombres como Hugo García los modelos a seguir: todavía me viene a la memoria un escrito suyo sobre la censura, sus ideas sobre la formación, y la dirigencia sindical con conciencia crítica que necesitan las instituciones bibliotecarias. Para mí, Hugo García era uno de esos grandes seres que a su paso dejan una semilla para que sepamos que debemos insistir en el amor por lo que hacemos.


¿Cómo definirías a un bibliotecario?

Dado que han cambiado las condiciones en estos inicios del siglo XXI, un bibliotecario debe ser un activista del conocimiento al servicio de las transformaciones populares basadas en la transparencia de la información, en la defensa integral del patrimonio bibliográfico y un agente comunitario con una visión democrática que facilite la formación popular de un espíritu crítico y a la vez creativo, participativo, en las bibliotecas. Creo que el bibliotecario debe ser ante todo un luchador con responsabilidad social, partidario ante todo de la pluralidad cultural, defensor del libro como signo de identidad y con la capacidad de fomentar la lectura y la ciudadanía local y global. La crisis económica mundial ha puesto en evidencia que hay una corriente a favor de privatizar el conocimiento, recortar reivindicaciones laborales, constituir grandes latifundios informativos, y eso hay que enfrentarlo con principios cooperativos, con unidad sincera y consciencia popular.


¿Recordás la primera vez que entraste a una biblioteca? ¿como fue?

Borges dijo una vez que para él una biblioteca era el paraíso, uno de los mitos religiosos más potentes de las religiones conocidas. Para mí, que conocí la pobreza más ruda en mi infancia, una biblioteca siempre fue un refugio contra la desesperanza, contra la exclusión, contra la ignorancia, contra la soberbia, contra el dogmatismo. La primera vez que entré en una biblioteca de aldea era muy niño y mi madre me dijo: "Aquí te dejo junto a los que serán tus mejores amigos, los libros". Fue una iniciación, una forma extraordinaria de comprender que no sólo estaba en un lugar físico sino en una dimensión espiritual. Sin saberlo, la biblioteca se convirtió repentinamente en mi escuela para asumir con plenitud la importancia de la justicia, la vida y la memoria.

Nota: la entrevista fue publicada en la Revista Fuentes del Congreso de Bolivia en
Rev. Fuent. Cong., Diciembre 2012, vol.6, no.23. ISSN 1997-4485



lunes, 22 de abril de 2013

23 de abril: Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor


El día 23 de abril fue elegido como Día del Libro y del Derecho de Autor, pues corresponde al fallecimiento de los escritores Miguel de Cervantes, William Shakespeare e Inca Garcilaso de la Vega en la misma fecha en el año 1616 (aunque realmente no es así: Cervantes falleció el 22 y fue enterrado el 23, mientras que Shakespeare murió el 23 de abril... del calendario juliano, que corresponde al 3 de mayo del calendario gregoriano).
En esta fecha también fallecieron William Wordsworth (en 1850) y Josep Pla (en 1981). La Unión Internacional de Editores propuso esta fecha a la Unesco, con el objetivo de fomentar la cultura y la protección de la propiedad intelectual por medio del derecho de autor. La Conferencia General de la Unesco la aprobó en París el 15 de noviembre de 1995, por lo que a partir de dicha fecha el 23 de abril es el "Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor". El Día Internacional del Libro es una conmemoración celebrada a nivel mundial con el objetivo de fomentar la lectura, la industria editorial y la protección de la propiedad intelectual por medio del derecho de autor. A nivel internacional es promulgado por la UNESCO la cual lo hizo por primera vez en 1995. Se celebra cada 23 de abril desde 1996 en varios países, siendo en 2008 más de un centenar.1
Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_Internacional_del_Libro

viernes, 19 de abril de 2013

sábado, 13 de abril de 2013

Links para encontrar ebooks de dominio público en internet


Los siguientes links permiten encontrar ebooks y eAudiobooks en internet, de dominio público, en varios idiomas y para distintos formatos:


1. Biblioteca Digital Mundial
URL: http://www.wdl.org
Descripción: biblioteca y mediateca multilingüe que "pone a disposición en Internet, de manera gratuita y en formato multilingüe, importantes materiales fundamentales de culturas de todo el mundo". Los documentos pueden ser visualizados en línea y descargados en formato pdf.

2. Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes
URL: http://www.cervantesvirtual.com
Descripción: una de las bibliotecas digitales más importantes de la lengua y española y la cultura iberoamericana. Además de textos, contiene documentos multimediales y una hemeroteca virtual. Permite la visualización en línea y también la descarga de archivos en formato pdf.

3. Digital Book Index
URL: http://digitalbookindex.org
Descripción: índice que provee acceso a más de 165.000 ebooks en texto completo de más de 1800 editores comerciales y no comerciales, universidades y sitios particulares. Más de 140.000 de esos libros y textos están disponibles gratuitamente.

4. Inkmesh
URL: http://inkmesh.com
Descripción: motor de búsqueda (buscador) que facilita la localización de ebooks gratuitos para distintos dispositivos que pueden leer ebooks (Kindle, iPhone, Sony Reader, Nook, entre otros).

5. Internet Archive
URL: http://archive.org
Descripción: biblioteca digital dirigida a investigadores, historiadores, académicos, personas con capacidades diferentes y público en general. Incluye texto, audio, imágenes, software y un archivo de páginas web. Los documentos pueden ser visualizados en línea o descargados en distintos formatos.
  
6. LibriVox
URL: http://librivox.org
Descripción: biblioteca digital de audiolibros (eAudiobooks), grabados por una comunidad de voluntarios, que brinda acceso gratuito a una colección de poesía, cuentos, novelas y obras de teatro en varios idiomas, los cuales pueden ser descargados en formato mp3.

7. Project Gutenberg
URL: http://www.gutenberg.org
Descripción: una de las primeras bibliotecas digitales de eBooks y eAudiobooks de dominio público en la web, en varios idiomas, tanto para leer en línea como para descargar textos en distintos formatos (html, epub, mobi).



Fuente:
 http://bibliobina.blogspot.com.ar/2012/03/links-para-encontrar-ebooks-de-dominio.html





"La biblioteca es el lugar del ejercicio público de la razón" Gabriel Naudé

jueves, 11 de abril de 2013

"Borges, la Biblioteca y los Libros" - Acto de apertura de la 45 RNB

 Buenos Aires, 08/04/2013
Circular Nro. 016/2013

"Borges, la Biblioteca y los Libros" - Acto de apertura de la 45 RNB
Estimado socio:

Lo invitamos a participar en forma libre y gratuita al Acto de Apertura de la 45 RNB que se realizará el lunes 22 de abril de 18 a 21hs en la Biblioteca Nacional.

La primera Reunión Nacional de Bibliotecarios se llevó a cabo entre el 6 y el 13 de setiembre de 1962, en el antiguo edificio de la Biblioteca Nacional, coincidiendo su cierre con el Día Nacional del Bibliotecario. En dicha ocasión, Jorge Luis Borges, entonces Director de la Biblioteca Nacional, brindó el discurso de cierre.
Al cumplirse 50 años de este hecho que marcó a nuestra Asociación, tenemos la intención de rendir homenaje a aquellos pioneros que tuvieron la visión de realizar una reunión profesional de carácter nacional y a Jorge Luis Borges en particular por el apoyo que significó para ABGRA contar con su presencia.
Recordaremos los momentos más significativos de las primera reuniones nacionales en general y nos centraremos especialmente en el compromiso de Jorge Luis Borges con la profesión y las bibliotecas.

Conferencistas
Horacio González. Director de la Biblioteca Nacional
Ana María Cabrera. Profesora y Master en Literatura, conocedora de Borges y activa participante en conferencias y mesas redondas sobre la especialidad.
Graciela Ayos. Lic. en Bibliotecología y Documentación. Actual Presidente de ABGRA

Saludos cordiales,
Comisión Directiva.

Asociación de Bibliotecarios Graduados de la República Argentina
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lunes, 8 de abril de 2013

Acto de apertura de la 45 RNB



"BORGES, La BIBLIOTECA y los  LIBROS" - Acto de apertura de la 45 RNB


Lo invitamos a participar en forma libre y gratuita al Acto de Apertura de la 45 RNB que se realizará el lunes 22 de abril de 18 a 21hs en la Biblioteca Nacional.[Argentina]



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Buenos Aires, 08/04/2013--Circular Nro. 016/2013

El teléfono celular cumple 40 años: cómo mutó la vida de toda la población


Pasaron cuatro décadas desde la primera llamada hecha con un teléfono móvil. En esos años, pasó de ser un instrumento para hablar a una herramienta multifunción que permite realizar un sinfín de tareas cotidianas

Una de las primeras imágenes que quizás evoquen las cuatro décadas del celular es la de un teléfono voluminoso con muchos botones y una antena prominente: el recuerdo de un dispositivo arcaico que junta polvo en la mente al lado de una videograbadora y un reproductor de cassettes.

Los celulares debieron atravesar una metamorfosis de 40 años hasta convertirse en los equipos con los que estamos familiarizados hoy. Fueron perdiendo centímetros, gramos, botones y antenas para convertirse en equipos delgados y livianos, en muchos casos consistentes únicamente de una pantalla. Más aún, de la mano de la metamorfosis formal vino un cambio mayor: cambiaron radicalmente también a nivel funcional, al incluir más y más funcionalidades, y en esa transformación modificaron profundamente nuestros hábitos y costumbres.

"No ocupes el teléfono que estoy esperando un llamado"
El mandato era un clásico hasta hace poco más de una década, en un momento en que el teléfono de línea centralizaba las comunicaciones. La solicitud, más o menos amable de parte de hermanos, padres o parejas, era una sentencia al silencio.
Entonces, no quedaba más que esperar pacientemente a que ese llamado entrara para poder retomar la posesión del aparato y así poder hablar con la mejor amiga sobre el posible atuendo para la fiesta del sábado o discutir con el novio la salida el próximo fin de semana.

El celular abrió una nueva vía de comunicación, al principio secundaria y cada vez más central, en la vida de los usuarios que fue desplazando al teléfono fijo como medio fundamental para ponerse en contacto con los demás. A la vez, liberó a los usuarios de la obligación de permanecer atados a un lugar fijo para hacer o recibir un llamado y les dio la posibilidad de comunicarse en todo momento y lugar, sin cables de por medio.
Más aún, terminó con una serie de problemas que ahora resultan arcaicos: atrás quedaron los días de permanecer en casa esperando un llamado importante o el preguntarse a dónde estará esa persona con la que debíamos encontrarnos hace más de media hora: basta meter la mano en el bolsillo o la cartera para sacarse la duda.
La palabra escrita vs. la palabra oral

La llegada del celular encarnó la apertura de una nueva vía comunicativa; sin embargo, el teléfono móvil no inauguró uno sino dos canales de comunicación, ya que abrió las puertas a la revolución del SMS o mensaje de texto a partir de los años 90.
"Llego en 20'", "Comprá pan", "¡Aprobé!": aquellas informaciones cortas, de carácter sobre todo operativo, abandonaron la voz para trasladarse al texto. Con el correr del tiempo, el SMS fue cobrando protagonismo y muchas de las llamadas se fueron reemplazando por el más conciso y barato mensaje de texto.
El SMS se convirtió pronto en un auge y fue el canal privilegiado de comunicación especialmente entre los adolescentes. Sin embargo, del mismo modo en que el teléfono fijo fue perdiendo relevancia, el SMS comenzó su inevitable declive con la llegada del 3G y los servicios de mensajería instantánea.

Internet desembarca en el celular

Ya entrado el siglo XXI, internet comenzó a expandirse de forma imparable y fue cuestión de tiempo para que llegara a los celulares, que iniciaron su evolución hacia los smartphones. Así, se extendieron una vez más las posibilidades de comunicación: la casilla de mail también llegó al celular, despegando a los usuarios de la necesidad de correr a una PC en caso de caer en la cuenta de que no mandaron ese mail laboral crucial que deberían haber enviado hace horas.
Pero el correo electrónico no fue el único canal que se abrió con la llegada de internet al teléfono. Lejos de eso, fueron apareciendo varios servicios de mensajería instantánea, como WhatsApp o Viber, entre muchos otros, que recortaron terreno a los llamados y SMS.

Facebook y Twitter, junto con otras plataformas sociales como Foursquare o Instagram, también encontraron su lugar en los dispositivos y conectaron al usuario con millones de otras personas en cuestión de segundos al darle la posibilidad de comentar, tuitear o hacer check-in a gusto mientras hace la cola del súper o el colectivo intenta atravesar un embotellamiento de tránsito.

Una app para cada cosa

La tecnología siguió avanzando e hizo de los teléfonos dispositivos cada vez más inteligentes. La función más básica del teléfono, la de realizar llamados, comenzó a verse opacada por la infinidad de tareas que en la actualidad pueden hacerse desde el smartphone y que exceden lo meramente comunicativo.
El teléfono rápidamente se convirtió en una central de tareas: levantarse a determinada hora, hacer la lista del supermercado y no olvidar el cumpleaños del pariente al que no vemos muy seguido, todo con su propio ringtone, fue convirtiéndose en dominio del celular. Inclusive, ya no fue necesario recordar decenas de números telefónicos, ya que todos los contactos pasaron a formar parte de la agenda del celular.

Esas funcionalidades hoy consideradas más o menos básicas se fueron ampliando a partir del desarrollo de las aplicaciones para cada plataforma de smartphone. Las apps hicieron que el teléfono pudiera asumir nuevas identidades según las necesidades de sus usuarios: una herramienta para aprender idiomas, un libro de recetas de cocina, una isla de edición de foto y video, un anotador, un instrumento para bajar de peso o dejar de fumar, una linterna, entre muchísimas otras.

Así, por ejemplo, con Google Maps ya fue cada vez más difícil doblar en la esquina equivocada y perderse y gracias a los a veces imposibles niveles del Candy Crush Saga fue posible matar esos largos minutos perdidos esperando el turno en el dentista.
Usuario, fotógrafo y reportero

Otra de las novedades que incorporaron los teléfonos móviles fue la cámara. A medida que los avances tecnológicos fueron permitiendo mejor resolución y calidad, los dueños de smartphones se convirtieron en fotógrafos minuciosos de su propia vida, al tener la posibilidad de documentar los instantes fugaces de la realidad que quisieran y compartirlos de forma instantánea mediante redes sociales, mensaje o mail.

El momento en que el mejor amigo da el "sí, quiero", un gato haciendo monerías o el sol que se esconde detrás de los edificios de la ciudad: todos esos instantes de la vida diaria pueden ser almacenados en el teléfono, para que este guarde lo que quizás la mente del usuario condenaría al olvido de otra forma.
Más aún, la era de la fotografía (y video) móvil que se inauguró con los smartphones hizo a los usuarios testigos de acontecimientos de una realidad de la que es parte al tiempo que lo excede y les dio un lugar como corresponsales casuales de hechos. Inundaciones, asunciones de Papas y presidentes, revueltas, manifestaciones: el ojo del celular todo lo puede captar y retener.

El DynaTac 8000x, el primer celular que Motorola anunció en 1973 y salió a la venta diez años después, pesaba 800 gramos y sus medidas eran 330 x 45 x 89 milímetros. Hoy, en alrededor de 130 gramos y un grosor que oscila entre 7 y 9 milímetros, los smartphones centralizan, y facilitan, decenas de tareas que los usuarios realizan a diario. Solo resta por descubrir en qué formas los próximos teléfonos móviles impactarán en la vida de los usuarios durante los próximos cuarenta años.



"La biblioteca es el lugar del ejercicio público de la razón" Gabriel Naudé