El Nido de Cóndores (Fragmentos) En la negra tiniebla se destaca, como un brazo extendido hacia el vacío para imponer silencio a sus rumores, un peñasco sombrío. ¿Dónde van? ¿Dónde van? Dios los empuja, Amor de Patria y libertad los guía: ¡Donde más fuerte la tormenta ruja, donde la onda bravía más ruda azote el piélago profundo, van a morir o libertar un mundo! El cóndor lo miró, voló del Ande a la cresta más alta, repitiendo con estridente grito: "¡Este es el grande!" Y San Martín oyendo, cual si fuera el presagio de la historia, dijo a su vez: "¡Mirad! ¡Esa es mi gloria! ¡Y allá estará! Cuando la nave asome portadora del héroe y de la gloria. Cuando el mar patagón alce a su paso los himnos de victoria, volverá a saludarlo, como un día en la cumbre del Ande, para decir al mundo: ¡Éste es el grande! Olegario Víctor Andrade Mayo de 1877 |
El alma de las bibliotecas y Centros de documentación es el bibliotecario/a. El ha sido y es, el nexo entre el saber aquilatado, conservado y organizado en las nobles arquitecturas y la comunidad. Tiene responsabilidades, objetivos y obligaciones…pero esa alma corpórea es merecedora de los derechos que como Trabajador de la Información le corresponden; Este es nuestro desafió profesional: Construír a partir de nuestra propia identidad una organización genuina para los Bibliotecarios
martes, 16 de agosto de 2011
José Francisco de San Martín - In Memoriam -
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